“Las escuelas son talleres de
humanidad, laborando para que los hombres sean verdaderamente hombres” J. Comenio
GUÍA DE APRENDIZAJE Y TRABAJO AUTONOMO N° 02
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NÚMERO DE HORAS 08
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FECHA: Desde 20 de abril de 2020
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ASIGNATURA: historia
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Unidad 1: la
edad media (reconceptualizacion)
Temas:
El legado romano
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DOCENTE: JUAN ESTEBVAN GAÑAN ROMAN
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LOGROS ESPERADOS:
Clasifico,
comparo e interpreto la información
obtenida en
las diversas fuentes.
· Utilizo
herramientas de las diferentes
disciplinas
de las ciencias sociales para
analizar la
información.
· Saco
conclusiones.
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PERIODO: 2
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CRITERIOS DE EVALUACIÓN:
Análisis de textos y videos relacionando conceptos
Trabajo práctico relacional en casa para ser enviada su producción de
manera paulatina solo por actividad
Evaluación reflexiva por el blog
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GRADO: noveno
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Reciban todos un cordial saludo, la presente guía tiene como fin,
avanzar conceptual mente sobre los contenidos temáticos de las clases
correspondientes al mes de mayo, en ese orden de ideas, encontraran a
continuación las clases numeradas del 1 al 8, pues nuestra intensidad horaria
es de una hora por semana. Vale la pena
recordar, que estas cuatro clases son las 4 primeras clases del segundo
periodo. Las actividades estarán
señaladas en recuadros, con el fin de una fácil identificación.
Clase 1 y 2
Nota:
según la guía anterior, la historia se puede rastrear en cualquier tipo de rastro
dejado por el ser humano a través de la cultura (como la música, la literatura,
los escritos oficiales, las noticias, etc.) entre ellas la religión. Las 2 clases tendrán como elemento principal “el
cristianismo”. Una vez más les aclaro a ustedes y a los padres de familia, que
no hace parte de los objetivos de esta asignatura, el adoctrinamiento religioso,
lo que considero una gran falta de respeto, pues lo importante aquí no es
convencerles de creer en una religión determinada, sino entender que nuestra
cultura occidental, está fuertemente marcada por los hechos históricos que
rodearon la cristiandad.
El
cristianismo
Por
: Felipe Pigna
La religión cristiana surgió en torno a la persona de Jesús de Nazaret,
nacido en Palestina en el año 753 de la fundación de Roma, y el comienzo de la
era cristiana, durante el gobierno de Augusto. Desde el 63 a. C. la zona de
Palestina había sido ocupada por las legiones romanas comandadas por Herodes
Antipas, con el título de rey. La comunidad judía, a la que pertenecían Jesús y
su familia, estaba regida por un Consejo o Sanedrín, presidido por un rabino
elegido por el procurador romano.
¿Quién fue Jesús?
Jesús nació en Belén, hijo de María y José, vivió unos 30 años en
Nazaret trabajando como carpintero junto a su padre. Luego partió a recorrer
Judea durante tres años propagando sus ideas, llamándose a sí mismo el Mesías
(Cristo en griego = el Ungido) y el hijo de Dios. Doce discípulos, los
apóstoles, lo acompañaron durante ese tiempo. Las enseñanzas de Jesús
molestaron tanto a las autoridades romanas como a las judías del Sanedrín y fue
condenado a muerte y crucificado en la pascua del año 33.
¿Cuáles eran sus ideas?
Las ideas de Jesús implicaban una verdadera revolución. Decía que todos
los hombres son iguales ante Dios y que la salvación no dependía de la fortuna
o de la práctica de ritos o ceremonias, sino de la fe y las buenas acciones de
los individuos. Proponía la caridad y el amor al prójimo como normas de vida
con relación a todos los seres humanos, incluso a los enemigos. La recompensa a
los sufrimientos de este mundo estará en la otra vida, en el cielo al que se
accederá tras el juicio final. Negaba el egoísmo, la hipocresía y la vanidad.
Le quitaba el carácter divino al emperador al decir «Al Cesar lo que es del
Cesar y a Dios lo que es de Dios».
¿Por qué se difundió tanto el cristianismo?
Mucha gente estaba descontenta con los viejos credos basados sobre todo
en la obediencia a las normas y ritos pero con poco contenido espiritual. El
cristianismo venía a proponer una esperanza de cambio y salvación para las más
pobres y olvidadas en una épocas de cruel explotación y desesperanza. Jesús y
sus seguidores predicaban sobre todo con el ejemplo, llevando una vida sana y
solidaria, rechazando la riqueza y el poder y entregando sus vidas por defender
sus ideas. La coherencia entre la palabra y la acción le valió la adhesión de
mucha gente primero en Palestina y luego en todo el Imperio Romano.
¿Cómo eran las primeras comunidades cristianas?
Los discípulos de Jesús afirmaron que tras su muerte había resucitado y
ascendido al cielo. Este hecho confirmaba para ellos el origen divino de Jesús.
Estos primeros cristianos se organizaron en comunidades que carecían de
jerarquías y donde todo se compartía. La ayuda mutua era la base de la vida en
estas comunidades, a las que se accedía tras el bautismo. El nuevo miembro se
incorporaba a la Iglesia (en griego ekklesía = asamblea) y se dedicaba a predicar
las enseñanzas de Jesús.
De las persecuciones a la religión oficial
En un principio los romanos no distinguieron a los cristianos de los
demás judíos, pero a partir de Nerón se hicieron frecuentes las persecuciones
contra los seguidores de Jesús que predicaban las enseñanzas impartidas por los
apóstoles Pedro y Pablo en Roma. En el año 64 d. C. un incendio destruyó parte
de la ciudad de Roma y Nerón acusó de ello a los cristianos desatando una
violenta persecución sobre ellos. Los cristianos, que eran monoteístas, se
negaban a adorar a los múltiples dioses romanos y a reconocer el carácter divino
del emperador, lo que era visto como un mal ejemplo por las autoridades
imperiales, a lo que se sumaba que la doctrina cristiana era considerada
peligrosa por predicar el fin de los privilegios y la igualdad entre los
hombres. No todos los emperadores persiguieron a los cristianos. Trajano y
Adriano los toleraron y los dejaron practicar su religión. El emperador
Constantino se convirtió al cristianismo y a partir de allí esta religión se
convirtió en la oficial.
Los padres de la Iglesia
Al ascender Jesús a los cielos encomendó a Pedro la conducción de la
Iglesia, transformándose así en el primer jefe del catolicismo. A partir de la
conversión de Constantino, el obispo de Roma, llamado Papa o Sumo Pontífice
gobernará a los católicos de todo el mundo. A partir del siglo IV surgieron
grandes escritores que se dedicaron a difundir la doctrina cristiana, como San
Jerónimo (331-420) que tradujo la Biblia del original hebreo al latín; San
Agustín (354-430), el más famoso de los «padres de la Iglesia» y uno de los más
grandes pensadores cristianos.
Los textos cristianos
El Nuevo Testamento, compuesto por las epístolas (cartas) de San Pablo
escritas durante los años 41 y 61, los Evangelios o relatos de la buena nueva,
compuestos después del año 70 por cuatro discípulos, de los cuales dos San Juan
y San Mateo conocieron a Jesús). La buena nueva es la salvación prometida a los
que creen en Dios y en Jesús, su hijo: un cristiano cree firmemente en Cristo,
espera todo de su bondad, manifiesta hacia su prójimo caridad y amor y llega a
desprenderse de todos los bienes materiales.
Ahora, vamos a imaginar y reflexionar
Recuerda que el conocimiento es para compartir y disfrutar.
Con la ayuda de tus amigos o de tus familiares si puedes, crea una
historia cuyo protagonista sea Jesus en nuestros días. Incluye en esa historia
elementos geográficos, políticos, económicos y sociales. Pon a volar tu
creatividad, no olvides el buen humor si te es posible y demuestra con esta
producción, que comprendiste el lugar y los efectos de Jesus en el desarrollo
de nuestra cultura e historia.
Clase 3 y 4
Por el momento vamos a
dejar nuestros conceptos históricos sobre la cristiandad, ahora gireremos la
mirada hacia el imperio romano, es decir que nos aproximamos a conocer algunos
sucesos históricos de la cristiandad desde la biblia como fuente histórica,
ahora nos aproximaremos a entender la importancia de Roma, obviamente en un
contexto histórico, aclarando que es una observación sin pretenciones
nacionalistas por naciones o estados extranjeros. Solamente reconociendo que en
un punto geográfico determinado y en un momento determinado, una sociedad de
grandes avances políticos, sociales y tecnológicos hizo de su historia un
evento paradigmático para las futuras sociedades, entre ellas la nuestra.
Por otra parte lo que
aquí les propongo, es una lectura breve, que se les puede hacer densa y
aburridora, para lo cual les recomiendo paciencia y ganas de aprender, pues es
la única forma que encuentro de resumir los elementos básicos que debían ser explicados
en clase. Si te da sueño al leer, haz una pausa activa pero no pauses por mucho
tiempo para que no pierdas el hilo del tema.
Recuerda que las
actividades todavía no serán recogidas, pero es necesario que las tengas listas
para el momento en que se soliciten. no dejes que el tamaño de la lectura te
abrume, te recomiendo que realices la actividad distribuyendo bien tu tiempo de
acuerdo con la intensidad horaria de la asignatura
Realiza una lectura
comprensiva del siguiente texto
Haz un listado de todas
las palabras que te sean desconocidas
ROMA
Durante muchos años se ha explicado el apogeo y la
ascensión de Roma argumentando que se debía al carácter moral, las
instituciones políticas, el talento militar y la buena suerte del pueblo
romano. Se basaban también en el entorno físico de Roma e Italia, afirmándose
que Italia estaba ubicada en el corazón del mundo habitado. Se alabó la
productividad de la península italiana, ampliándose bajo los ojos de sucesivos
historiadores al conjunto de la región mediterránea. En el caso específico de
Italia, se señala la longitud de la Península, la extensión de los Apeninos y
las variedades climáticas que no dejan de estar relacionadas con ello y son
garantía de una variedad y una gama exhaustiva de alimentos.
El Imperio Romano, en su apogeo, a principios del
siglo III d.C, comprendía no solo las penínsulas, islas y costas del
Mediterráneo, así como grandes extensiones del interior (hasta el borde del
Sahara y hasta el río Tigris), sino también zonas de Europa situadas tan al
norte como el sur de Escocia, el Rin y el Danubio (además de una parte del sur
de Alemania, al otro lado del Rin y la Dacia al otro lado del Danubio central).
Además, bajo el principado, los avances más extensos se hicieron en Europa
mediante el reinado del primer emperador, Augusto. Sus generales empujaron la
frontera septentrional desde los Alpes hasta el Danubio y finalmente pacificaron
la Península Ibérica.
Más allá del motivo de la pura conquista,
consideraciones estratégicas y a veces económicas desempeñaron algún papel en
la configuración de las campañas de los emperadores que se mostraron más
activos en el terreno militar.
El imperio romano se extendió mucho más allá del mundo
mediterráneo, sin embargo, durante todo el período del principado,
aproximadamente desde 27 a.C. hasta 235 d.C., el eje político y la base
cultural del imperio se encontraban en el Mediterráneo.
ROMA, ITALIA Y LA ELITE POLITICA
Roma era la sede de los emperadores, la corte y la
administración y además, la residencia de cerca de un millón de personas. Era,
esencialmente, una ciudad parásita. Una ciudad que se alimentaba del potencial
humano y la riqueza de Italia y de las numerosas provincias que constituían el
imperio romano.
El crecimiento fue espectacular, quintuplicándose la
población en dos siglos, con altos niveles de inmigración y movimientos de
esclavos de las provincias. Las distribuciones de grano y las costosas obras
públicas fueron financiadas con impuestos imperiales y rentas de propiedades
públicas arrancadas de los territorios de otros estados. Esta situación
privilegiada duró hasta finalizar el siglo III, momento en que Diocleciano
introdujo una administración pública en Italia y creó impuestos sobre la
propiedad y de capitación
Solo de forma lenta y a regañadientes abrió la elite
romana e italiana sus filas a los provincianos, a la vez que siguió siendo muy
selectiva en los campos donde les permitía estar representados. Hasta finales
del siglo I, únicamente entraron en el senado provincianos occidentales de
lengua latina y a partir de ahí y gradualmente, individuos de habla griega.
La literatura de la época, que fue creada por los
portavoces de la elite política y cultural del imperio, revela actitudes que
ayudan a explicar la ausencia de hombres del norte en los altos cargos, así
como la orientación Mediterránea del imperio durante la totalidad del período
que nos ocupa.
LA CIVILIZACION Y SUS LIMITES
Los romanos ilustrados reconocieron de forma
progresiva la superioridad de la cultura griega , a la vez que familias
aristocráticas de Roma y Grecia forjaban vínculos de interés mutuo.
El Gobierno romano abordaba las cosas de un modo
pragmático y sus objetivos culturales eran limitados; los pueblos fronterizos
tenían que ser domados, neutralizados y explotados. Los antiguos vivían con
solo un conocimiento parcial incluso de la parte del mundo con la que estaban
familiarizados.
El ejercito romano impuso un poco de orden trazando o
midiendo en millas romanas, un sistema arterial de carreteras y acumulando un
conjunto de informaciones razonablemente fidedignas sobre localidades
determinadas.
GOBIERNO SIN BUROCRACIA
Un aparato funcionarial rudimentario era suficiente
para un Gobierno al que solo le preocupaba los aspectos esenciales. Los
objetivos básicos del Gobierno eran dos: mantener el orden y recaudar
impuestos, para pagar los salarios, sufragar los gastos militares, construir
edificios y repartir alimentos en la capital.
ADMINISTRACION CENTRAL Y PROVINCIAL
Había alrededor de cuarenta provincias en el imperio
romano, las cuales eran gobernadas por un reducido número de funcionarios,
nombrados por las autoridades centrales, llamados procónsules.
A continuación aparecen procuradores que ejercen de
funcionarios fiscales: recaudan el derecho de aduana, el impuesto sucesorio y
otro indirectos.
El emperador, era en esencia, responsable de las
decisiones que afectaran las normas de actuación y el nombramiento de
funcionarios imperiales; escuchaba los consejos de quienes le rodeaban. Estos
consejos asesoraban al emperador en el desempeño de sus obligaciones jurídicas
en calidad de juez y legislador.
LAS CIUDADES
El secreto del Gobierno sin burocracia era el sistema
romano de ciudades que se gobernaban a sí mismas y podían cubrir las
necesidades del imperio. Hay una expansión notable de las unidades urbanas
autónomas.
Como organizadores del imperio, lo que más valoraban
los romanos era la función administrativa de la ciudad, sin que ello les
hiciese perder de vista su papel potencial como centro de romanización en zonas
recién conquistadas y no pacificadas del todo.
UNA ECONOMIA SUBDESARROLLADA
La economía romana estaba subdesarrollada. Las masas
vivían en el nivel de subsistencia, o cerca de él. Es preindustrial, con una
gran proporción de la fuerza laboral concentrada en el campo, que es el
principal camino para las inversiones y también la principal fuente de riqueza,
a su vez, las inversiones en la industrias manufactureras es bajo. La
tecnología atrasada es una barrera más, que obstaculiza el incremento de la
productividad. En la Roma antigua, predominaba la pequeña industria artesanal,
eran artículos de consumo básico y barato y la demanda de los mismos era
constante. Como la ropa y los artículos de cuero para el trabajo campesino y
los utensilios de cocina, asi como la producción metalúrgica de herramientas.
En Roma, al igual que en otras economías
preindustriales, el comercio recibía parte del capital que no recibía salida en
la industria. Los medios de transporte eran atrasados. Inevitablemente, la
mayoría de las regiones agrícolas apuntaban a la subsistencia, en lugar de a la
producción de un excedente exportable.
En general, el atraso y los gastos de transporte y el
nivel relativamente bajo de la demanda limitaron las oportunidades de efectuar
inversiones lucrativas en el comercio. Prestar dinero producía más ganancias,
los tipos de interés eran altos donde había riesgo. Las inversiones en tierras
ofrecían seguridad y unos ingresos continuos.
En las sociedades preindustriales, el sistema de
valores que predomina es el de una aristocracia hacendada, una clase próspera
integrada por mercaderes, que representa una amenaza potencial para los
aristócratas.
El Crecimiento y sus Límites
La subida de Augusto al trono fue el principio de una
era de Gobierno relativamente estable, requisito básico para la recuperación
económica y la expansión. El nuevo régimen se hallaba entregado a la causa de
la paz civil y la pacificación de los enemigo de Roma. El éxito de esta
política fomentó el desarrollo económico interno y, en la medida que amplió el
territorio controlado por los romanos, agrandó los horizontes económicos del
imperio.
El problema de documentar el crecimiento económico y
medir su importancia se agudiza de forma especial en el caso del comercio. Se
intenta demostrar la expansión del comercio basándose en: que la exacción de
impuestos monetarios en las provincias por parte del Gobierno romano incrementó
en gran medida el volumen de comercio en el imperio; que los niveles de consumo
eran muy superiores en el período romano, que en el prerromano, al menos en
Occidente; que la mayor incidencia de naufragios, haciendo suponer un mayor
tráfico marítimo y por último, se produjo un incremento de la oferta monetaria,
que permitió financiar un aumento del comercio interregional.
Los intereses y las necesidades del Gobierno romano
eran pocos. Aparte de la guerra y la diplomacia, su preocupación básica era
abastecer y financiar el estamento militar, la burocracia y la corte. Una vez
cumplida la obligación permanente de alimentar a la plebe de la ciudad de Roma,
el Gobierno tenía que gastar dinero en edificios públicos y diversiones para la
capital y proporcionar periódicamente ayuda material a las comunidades en
tiempo de crisis. El impuesto sobre las tierras agrícolas en todas las provincias,
menos en Italia, era el que servía para sufragar la mayor parte de los gastos.
LA TIERRA
La disposición de la propiedad entre los ricos se
representan en tres grandes tipos que se corresponden aproximadamente con las
tres categorías de terratenientes:
a) La pequeña nobleza local tenia más o menos toda su
tierra en la región de origen.
b) Los senadores de categoría media y los ecuestres de
procedencia municipal tenían uno o más centros de propiedad, además de sus
fincas locales.
c) Los miembros más ricos de la élite romana poseían
un complejo de propiedades en Italia y en el extranjero.
Era posible reunir las condiciones básicas para ser
senador acumulando propiedades sencillamente en el territorio de donde se era
oriundo y eso era lo que hacían muchos hombres de ambición limitada.
Hubo un aumento de los intereses rústicos de
exmagnates municipales, siendo consecuencia natural de su ascensión social y
política. Los senadores provinciales adquirían tierras en Italia, en primer
lugar cerca de la capital y a escala pequeña. Se les ordenó que incrementaran
sus intereses en Italia hasta que alcanzasen un tercio de su fortuna, bajándose
posteriormente a una cuarta parte.
Egipto fue un caso especial, puesto que se trataba de
un dominio privado del emperador, y los senadores romanos y otros funcionarios
de alto rango tenían negado el acceso a él. A los miembros de la familia
imperial y a los colaboradores más cercanos y allegados del emperador, se les
otorgaban las rentas de fincas individuales, pero sin ser los propietarios de
la tierra.
El Tamaño de las Propiedades
El término latifundio aparece en las fuentes
literarias, precisamente en tiempos de esos hombres, a mediados del siglo I
d.C. Los agrónomos no querían entrar en definiciones del término, pero se
estipuló que con un millón trescientos mil sestercios se podía comprar un
latifundio. Se califican así los ranchos donde se cría el ganado a gran escala,
o las grandes plantaciones de cereales, con los ejemplos de Africa, Sicilia y
partes de Italia. También se usa el término para referirse a fincas
desperdigadas de una sola persona, que juntando todas, forman un latifundio.
Hubo críticas a individuos que tenían en sus manos
inmensas extensiones de tierra cultivable, parte de la cual había permitido que
degenerase en pastizales. Existe la suposición que las propiedades de la
mayoría de los hombres libres no se hallaban concentradas en fincas inmensas,
sino que eran diversas propiedades más pequeñas y dispersas.
Administración y Trabajo
En cuestiones de administración y trabajo, la clase
propietaria tenía varias opciones. Una de ellas era el estamento esclavo, donde
los esclavos constituían de modo permanente tanto la fuerza laboral como la
administración y se importaba mano de obra temporal, libre o esclava, en los momento
de máxima actividad, concretamente la cosecha. Si el terrateniente no
administraba la tierra directamente a través de un mayordomo esclavo, entonces
arrendaba la tierra.
La Productividad
La comparación entre lo antiguo y lo moderno, que a
menudo es implícita, al menos en la literatura, es especialmente inútil. Tiene
un interés intrínseco limitado y no proporciona información alguna sobre las
pautas agrícolas de la Antigüedad. Poco se consigue afirmando la ya obvio, que
los antiguos no obtenían cosechas de gran rendimiento, como por ejemplo el maíz
y las papas, o para el caso, las variedades mejoradas del trigo de que ahora
disponen los agricultores. No se conocían los métodos modernos para mejorar la
tierra, entre los que destacan los fertilizantes químicos y las técnicas
avanzadas de riego, ni tan siquiera maquinaria pesada. Lo que cuenta es la
medida en que las necesidades alimentaria de una sociedad se ven satisfechas
por la economía existente, y en particular, por el sistema agrícola
predominante. La eficiencia y productividad de la agricultura antigua deben
juzgarse atendiendo a su capacidad de mantener a las sociedades antiguas a lo
largo del tiempo.
En el caso de los rendimientos, hay que decir que
había enormes variaciones según las regiones y terrenos de la cuenca del
Mediterráneo. El resultado es que los datos antiguos que tenemos no corroboran
la tesis de que había rendimientos medios bajo en el caso del trigo y de otros
cereales. En el caso del pequeño propietario, no está bien deducir o suponer
que tenía un rendimiento .
EL ABASTECIMIENTO DEL IMPERIO ROMANO
En la Roma de Augusto, la población rondaba el millón
de personas, de las cuales, los receptores de grano, se cifraba en 250.000
ciudadanos. Estos eran exclusivamente varones, con derecho a ello a partir de
los 10 años de edad. Esto da a entender que había unas 675.000 personas
dependientes de este reparto de grano. Una población esclava del 30 por ciento,
cifra razonable, más los extranjeros libres y personas de alta y baja condición
que nada tenía que ver con el reparto de grano, nos da aproximadamente la
composición del millón de habitantes. Era una cifra formidable, solo alcanzada
por Londres a finales del siglo XVIII. Roma pudo crecer tanto y seguir siendo
tan grande, solo porque aprovechó los recursos de todo el imperio.
El estado no se ocupó de la importación de artículos
de consumo, exceptuando el trigo. Se dice que Septimio Severo añadió raciones
de aceite y que Aureliano hizo lo propio con carne de cerdo y vino barato.
Los impuestos y tributos eran un fenómeno nuevo en las
regiones que integraban el imperio romano. Lo que ocurría a consecuencia de las
conquistas imperiales y de la imposición de censos que abarcaban todo el
imperio, era que los impuestos se recaudaban de forma un poco más eficiente que
antes. Los tipos impositivos son relativamente bajos, pero no era necesario
subirlos, los requisitos del Gobierno eran pocos, porque sus intereses eran
limitados.
VI. LA JERARQUIA SOCIAL
El sistema de adquisición y transmisión de la propiedad
era la base, en el caso de Roma, del entramado de desigualdad social y
económica. La romana era una sociedad agraria en la cual la riqueza consistía
esencialmente en tierra y se adquiría por herencia a través de la familia.
A los soldados se les recompensaba con una paga
adecuada, generosa en el caso de los oficiales, y una remuneración sustanciosa
al retirarse, lo cual les permitía convertirse en miembros prósperos de la
comunidades locales.
La explotación directa de la mano de obra por parte de
propietarios ricos era un rasgo central de la sociedad imperial romana. En el
mundo romano, el enriquecimiento no consistía en la acumulación de beneficios
por medio de la actividad de compañías. En gran medida, la riqueza de los
miembros de la clase propietaria era contar con el trabajo de sus dependientes
personales.
La condición social
La condición social de un romano se basaba en la
estimación social de su honor, es decir, en la percepción de su prestigio por
parte de quienes le rodeaban. Las contradicciones entre la condición y el rango
daban origen a tensiones.
En cada orden había sutiles gradaciones de condición
social. Dentro del orden senatorial, que experimentaba un gran movimiento de
familias, los que podían hacer alarde de antepasados consulares, los nobles,
sobresalían de la masa de recién llegados.
La mayoría de los libertos eran hombres humildes, se
casaban con mujeres del mismo rango, a menudo seguían dependiendo de sus
anteriores amos y por consiguiente, no presentaban ninguna contradicción difícil
entre el rango y la condición social.
LA FAMILIA Y LA
UNIDAD DOMESTICA
Cuando los romanos de la época de Augusto comparaban
sus propios tiempos con el pasado idealizado, se lamentaban de la decadencia de
la moral familiar La familia era la unidad social básica por medio de la cual
se trasmitía la riqueza y la condición social. La perpetuación de la
aristocracia, las posibilidades de movilidad social, la distribución de riqueza
consistente en tierras y otras cuestiones dependían fundamentalmente de las pautas
de comportamiento de la familia.
En el primitivo derecho romano, una mujer al casarse,
quedaba bajo la autoridad de su esposo y dejaba la potestad y la unidad
doméstica de su padre para unirse a su esposo. El matrimonio no podía romperse
sin una causa seria y sin que la parte que estuviera en falta, sufriera grandes
pérdidas económicas. Mientras el esposo vivía, la dote y las propiedades de la
esposa le pertenecían por completo. Al morir el esposo, la esposa, según las
reglas de la sucesión, tenía derecho a una parte igual del patrimonio en
calidad de heredera principal junto a sus hijos.
Las mujeres romanas gozaban de una independencia
jurídica en el matrimonio, restringida por diversas costumbres sociales. Los
hombres de Occidente se casaba por primera vez cuando rozaban los treinta y las
mujeres alrededor de los veinte. El hombre tarde y la mujer pronto.
Padres e Hijos.
El rasgo característico de las relaciones entre las
generaciones en las familias romanas era el autoritarismo. Tal vez el más notable
fuera el poder de vida y muerte. Hasta finales del siglo IV, los padres romanos
podían decidir que criaban a sus hijos o si los exponían.
El paterfamilias tenía los derechos de propiedad
oficial sobre todos los bienes, incluyendo los que sus hijos adquiriesen por
medio del trabajo.
Cuando el padre moría sin haber hecho testamento, el
derecho civil disponía que la herencia divisible se repartiera a partes iguales
entre todos los hijos legítimos (varones y mujeres).
La mortalidad infantil era común. La cuarta parte de
los recién nacidos no llegaba a cumplir un año de edad y puede que hasta la
mitad de ellos no alcanzaran los diez años. Los que conseguían salir vivos de
las enfermedades infantiles de su primer decenio podían esperar vivir otros
treinta y cinco o cuarenta años más. Las mujeres romanas que llegaban a la edad
adulta, tenían que dar a luz una media de cinco o seis hijos para que la
población no entrara en decadencia.
LAS RELACIONES SOCIALES
El lugar de un romano en la sociedad estaba en función
del puesto que ocupase en la jerarquía social, de su pertenencia a una familia
y de su participación en una red de relaciones personales que salía al exterior
partiendo de la unidad doméstica.
Un hombre podía tener amigos superiores, amigo
iguales, amigos inferiores y clientes humildes, y la inclusión de otros en una
de estas categorías, dependía de los recursos que tuvieran.
Los que podían intercambiar beneficios comparables
eran amigos de igual posición, mientras que la mayoría ocupaba un lugar más
alto o más bajo en la jerarquía, de acuerdo con su capacidad de corresponder
con servicios superiores o inferiores. Las tres categorías generales de
intercambio según la condición social eran las de patrono y clientes, amigos
superiores e inferiores y amigos iguales.
El emperador distribuía sus beneficios individualmente
entre los que tenían acceso a él, y de forma más amplia, entre grupos
favorecidos, especialmente la plebe de Roma y el ejército. A cambio, se
esperaba fidelidad y gratitud.
Los filósofos romanos daban mucho valor a la amistad y
hacían hincapié en que los amigos ideales debían compartir inquietudes y
valores comunes de un modo totalmente desinteresado. Si un romano era víctima
de una catástrofe, por ejemplo un incendio en su casa, existía la costumbre de
que los amigos le ayudaran a reconstruir su unidad doméstica.
Excluir a los amigos del testamento, o peor aún,
criticarlos en él era un insulto que llamaba la atención pública. Pero detrás
de la fachada de cooperación, había rivalidad: si un amigo no correspondía a un
favor con otro de importancia pareja, se arriesgaba a caer en la condición de
amigo inferior, con la consiguiente pérdida de honor.
LA RELIGION
La religión oficial de Roma era un racimo de creencias
que se expresaban por medio de un complejo sistema de instituciones y rituales.
Los romanos aceptaban la idea de que la seguridad y la prosperidad de sus
comunidades dependía de los dioses, cuyos favores se conquistaban mediante el
correcto cumplimiento de toda la serie de prácticas de culto heredadas del
pasado. La supervisión de la religión del Estado se hallaba en manos de la
autoridades políticas. Los sacerdocios eran desempeñados por los mismos hombres
que ocupaban cargos políticos.
Los cargos religiosos, al igual que todo lo demás,
quedaron bajo el control del emperador. Los colegios sacerdotales se vieron
privados de su influencia en la toma de decisiones políticas y reorientados al
servicio del emperador.
Entre las cosas que Roma exportó al imperio, la
principal fue el culto a los emperadores. Fue la única intrusión romana en el
campo del culto que se toleró en el mundo griego. La aceptación del culto
imperial no supuso el desplazamiento de los cultos a los dioses tradicionales.
Este culto imperial atrajo a Augusto, y posteriormente a sus sucesores, porque
podía utilizarse para concentrar la lealtad de la gente de las provincias en la
persona del emperador. El culto es importante por su novedad, su ubicuidad y
por sus funciones en calidad de transmisor de la ideología imperial, foco de la
lealtad para los muchos y mecanismo de progreso social para pocos.
En Oriente prosperó el culto a Zeus, el equivalente
griego a Júpiter. El templo de Zeus Olímpico en Atenas fue terminado bajo la
dirección de Adriano, que adoptó el título de Olimpios, como representante del
dios en la tierra.
En Egipto se hizo mucho daño a los cultos locales,
porque se fue despojando a las clases sacerdotales de su riqueza, su
independencia y sus privilegios. En general, los contactos de Roma con las
religiones extranjeras se caracterizaron por la penetración pacífica en vez de
por la coacción.
La ascensión de Cristianismo.
El cristianismo fue el principal beneficiario de que
los defensores de la religión estatal no consiguieran controlar las
innovaciones. Los cristianos provocaban la persecución al negar los dioses de
Roma, lo que les valió la etiqueta de ateos.
Se siguió la política de Trajano de no perseguirles.
Cuando lo hicieron fue en contextos locales, individuales, donde la ley y el
orden corrían peligro, debido a la agitación de los adversarios entre los
paganos y con menor frecuencia, entre los judíos.
A pesar de todo, de vez en cuando los cristianos se
convertían en el centro de disturbios civiles. Los dioses expresaban su ira
mandando plaga, hambres y otros desastres naturales, más la guerra civil y la
guerra con otras naciones, cuya responsabilidad se atribuía a veces a los
cristianos.
Pero el cristianismo ya era un éxito. No consiste en
invocar un supuesto debilitamiento de la estructura del politeísmo que redujera
su atractivo y diese más ímpetu al cristianismo, al contrario, en el nivel de
la experiencia religiosa personal, el paganismo daba muestras de una vitalidad
considerable, especialmente a las postrimerías del período que estamos
estudiando.
CONCLUSIÓN
La expansión de Roma, desde el 27 a.C hasta el 235
d.C, fue mucho más allá de la cuenca Mediterránea. Los gobernantes tenían
objetivos que iban más allá. Consiguieron un nivel de unidad política y
cultural nunca vistos. El Oriente griego acepta su dominio, el norte de Africa,
Francia y la Península Ibérica, forman ya parte del imperio. El mundo no
Mediterráneo, la misión de Roma era conquistar y pacificar- Este vasto imperio era administrado por unos
poco funcionarios. Estos debían sus ascensos a factores personales en lugar de
a unas reglas y respondían directamente al emperador. Los objetivos del
Gobierno eran hace cumplir la ley y velar por el orden, así como recaudar
rentas.
La sociedad, la economía y la cultura de Roma y las
provincias, no experimentaron transformaciones a pesar de los constreñimientos
que imponían las expectativas limitadas del Gobierno, la gran extensión del
imperio y la diversidad de culturas que había en él y el nivel relativamente
primitivo de la vida económica.
La economía estaba subdesarrollada, si se mide por la
pobreza de las masas populares, el predominio de la mano de obra agrícola, el
atraso de la tecnología, la importancia de la tierra como fuente de riqueza y
el poder de la aristocracia hacendada. La paz y un Gobierno estable hizo
posible la prosperidad y el crecimiento económico a escala modesta.
El incremento de la producción agrícola en las
provincias occidentales se consiguió por medio de la intensificación y la
especialización de las cosechas en vez de lograrse mediante la innovación
tecnológica. Aun así, una economía subdesarrollada pudo satisfacer las
exigencias del Gobierno romano.
La sociedad de Roma estaba obsesionada por la
condición social y el rango.
Los ex soldados y los ex esclavos eran dos grupos en
ascensión. Las pagas y los donativos eran suficientes para que los veteranos se
retirasen con una riqueza modesta, y si eran oficiales, llegaba a ser
considerable, ocupando probablemente puestos en el Gobierno local.
La importancia de la familia en la sociedad era
significativa. En general, los emperadores se mostraron poco dispuestos a
alinear las leyes relativas a la familia con el comportamiento social. La
imagen clásica de la familia romana como unidad doméstica patriarcal gobernada
por un paterfamilias.
La historia religiosa, gira en torno a la estabilidad
de la religión oficial, la confrontación de dioses y cultos oficiales e
indígenas en las localidades y la ascensión del cristianismoLas religiones
indígenas se desintegraron. La transformación religiosa fue fruto de una
penetración pacífica.
El cristianismo, al que se identificó como fuerza
subversiva pero no peligrosa, fue el principal beneficiario de la actitud de
aceptación pasiva que el Gobierno romano adoptaba ante la innovaciones , así
como del permiso que daba al individuo para que siguiera sus propias
preferencias religiosas. El cristianismo solo fue tolerado oficialmente después
de la persecución oficial, y no hubo ninguna persecución durante el período del
principado.
Los emperadores eran fundamentalmente conservadores:
sus innovaciones administrativas fueron limitadas y dejan entrever que les
interesaba más controlar a sus funcionarios que dirigir las vidas de los
súbditos. Después que Roma surtiera el efecto inicial, la romanización era una
gran parte autodirigida, una respuesta que las élites locales daban a la
perspectiva de ver mejorados su categoría, su riqueza y su poder bajo la
protección de la autoridad imperial.
Belén Suárez de Lezo
Clase 5
Busca en el diccionario el significado de todas las palabras
que identificaste en la lectura anterior
Clase 6 y 7
Explica las principales características del imperio romano de
acuerdo a la lectura y a lo que puedas tú mismo investigar (ordena tu
conocimiento abordando las dimensiones políticas, económicas, y sociales)
Es hora de jugar con tu imaginación. Identifica bien el orden
social y político de la sociedad romana e intenta establecer un paralelo entre
ese orden social y el que tenemos actualmente
en el estado Colombiano. Debes hacer una reflexión sobre que tanto se parece
nuestra sociedad a la sociedad romana, identifica factores políticos sociales y
económicos. El texto te da suficientes argumento, solo resta tu creatividad
conceptual
Nota: no te dejes abrumar por esta actividad, parece difícil,
pero si lees bien te darás cuenta que es muy fácil.
Chicos los extraño mucho y les deseo la mejor de las suertes,
quieran a sus papitos y a sus mamitas.
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